JAIRO VELASCO

RESEÑA: 

 

Colombia y Estados Unidos se aprestan para afrontar desde el viernes una serie histórica por el repechaje del Grupo Mundial de la Copa Davis. Histórica para nuestro país, porque sería la primera vez que subiría a la zona de los mejores del mundo, y para los estadounidenses, porque sería su primer descenso.

En su palmarés de confrontaciones en el torneo por países más importante del tenis, estas dos selecciones se han enfrentado en dos ocasiones, con saldo de una victoria para cada una. La primera fue en 1974, con triunfo para Colombia por 4-1, y la segunda, en 1979, con barrida estadounidense 5-0.

Uno de los héroes de aquel triunfo del 74, catalogado todavía como uno de los más grandes del tenis colombiano, fue el bogotano Jairo Velasco, hoy con 63 años y quien hace 40 vive en Barcelona, junto con su esposa, la catalana Monserrat Andreu, sus tres hijos e igual número de nietos.

Velasco ganó en ese entonces sus dos partidos de sencillos y el de dobles, junto con el legendario Iván Molina. Y aunque hace 27 años se retiró de las canchas, aún lleva sobre sus hombros el rótulo del mejor colombiano en el escalafón mundial, al conseguir el puesto 40 en 1983 (se medía con un sistema diferente al actual). Desde entonces trabajó para la Federación Catalana de Tenis y desde hace un año disfruta de una merecida jubilación

ENTREVISTA POR EL ESPECTADOR:

¿Qué recuerdos tiene del triunfo sobre Estados Unidos en el 74?

Recuerdo que eso fue un acontecimiento nacional, porque claramente Colombia no era la favorita para ganar la serie, era casi imposible pensar que pudiéramos ganarle a una potencia como Estados Unidos. Se jugó en el club Los Lagartos, en casa, bajo las condiciones de la altura bogotana y con el público a favor. Eso sí, sabíamos que teníamos la posibilidad de pegarles un susto y vaya que se lo pegamos.

¿Ese ha sido el triunfo más importante del tenis colombiano?

Creo que sí, porque en esa época Colombia no tenía los medios para tener un patrocinio y apoyar a sus jugadores. Para salir al extranjero uno tenía que pedir ayudas por todos lados. No es como hoy en día, que ya se cuenta con dinero para poder viajar con su entrenador y estar mejor alimentados.

¿Qué significó ese triunfo en su carrera como tenista?

Para mí fue una gran alegría. Me dio más nombre, fui entonces un tenista más popular y eso, sin duda, ayudó para que el tenis fuera más conocido en Colombia. Económicamente no había dinero, no gané nada, pero igual fue un orgullo enorme.

Después de tanto tiempo usted sigue siendo el mejor colombiano ranqueado, ¿qué opina de esa situación?

Pues eso me pone muy feliz, pero la verdad a mí me gustaría más que otro colombiano lo lograra. Me encantaría tener a un compatriota entre los mejores 10 del mundo. Veo que es posible, porque ahora los tenistas tienen más posibilidades económicas.

¿Cómo analiza la serie que Colombia y Estados Unidos afrontarán desde este viernes?

Colombia tiene muchas posibilidades, porque cuenta actualmente con un buen equipo, con Santiago Giraldo y Alejandro Falla, quienes están entre los 60 mejores del mundo. Estoy convencido de que ellos son capaces de ganarle a cualquiera, porque cuentan además con la ventaja de la altura de Bogotá y el apoyo del público. Es una eliminatoria difícil, porque Estados Unidos es una potencia mundial. Será complicado, pero no imposible. Les deseo la mejor de las suertes a los colombianos y espero que los jugadores nuestros estén en las mejores condiciones en estos tres días.

¿Qué opina del juego de Santiago Giraldo?

Me sorprendió gratamente su juego contra el español Juan Carlos Ferrero, este año en la primera ronda del Abierto de Australia. Ese día, creo, que nadie podía vencerlo por la fortaleza de sus servicios y devoluciones. Él es un jugador muy agresivo que puede llegar muy lejos. Tiene un gran talento.

¿Y de Alejandro Falla?

Veo que las lesiones lo han aquejado mucho, especialmente en los momentos en los que está en su mejor nivel y eso le hace perder el ritmo. Pero es un jugador extraordinario, no tengo la menor duda.

¿Qué opina del equipo estadounidense que tendrá a John Isner, Mardy Fish y Sam Querrey?

Si los incluyeron en el equipo es porque en este momento son los de mayor rendimiento y los que mejor pueden jugar en la altura. Ellos no querrán verse sorprendidos y seguro que tendrán en mente el año 74, cuando perdieron en Bogotá. Van a ser precavidos.

¿Cómo analiza el actual nivel del tenis colombiano?

Veo que hoy en día, con las ayudas que se están teniendo en el país, lo normal es que cada vez tengamos mejores jugadores y logremos un buen semillero. El tenista colombiano es un luchador nato, que tiene malicia y si le dan facilidades, creo que vamos a tener muchos más en el Top 100.

¿Qué opina del actual número uno del mundo, el español Rafael Nadal?

Es un jugador fuerte, ganador nato y es muy difícil ganarle. Nadal va a durar varios años más dentro del Top del tenis mundial. Seguro que sí.

¿Cree que Roger Federer ya viene en su curva descendente?

Federer es el mejor tenista de los últimos tiempos. Tiene tanta facilidad para jugar que lo hace ver todo muy sencillo. Todo depende de su motivación. Como ya lo ha ganado todo, entonces depende de él imponerse nuevas metas para seguir un par de años más en la cima.

¿Cuál es la mayor diferencia entre el tenis que usted jugaba y el que se practica ahora?

Ha cambiado todo, las raquetas, las bolas y todo el dinero que hay de por medio. Antes los jugadores salíamos a cenar juntos, éramos amigos, una familia. Ahora hay mucha rivalidad, pero es debido a los intereses económicos. Ya no se saludan, cada uno va por su lado.

¿Prevalece ahora más la fuerza que el talento?

Sí, sin duda. Antes las raquetas eran de madera, no había esas diferencias de hoy. Ahora el físico es lo más importante, porque antes primaba la malicia, el talento...